¡Me parece increíble estar de nuevo escribiendo esta entrada! Sé que aún quedan unos días para terminar el año, pero tengo un libro a la mitad y muy poco tiempo para leer, así que puedo dar por finiquitado el año de lecturas. Antes de contaros cuáles han sido las mejores para mí, tengo que confesar algo. Si echo la vista atrás y recuerdo mis mejores novelas leídas de otros años, me sorprende. Y es que, sí, he evolucionado como lectora. Todos cambiamos en muchos aspectos de nuestra vida, y en este no iba a ser menos. Creo que el hecho de escribir y estar en constante aprendizaje me hace enfrentarme a cada nuevo libro con otros ojos. Unos ojos que quizá sean más críticos, y con los que, en ocasiones, disfruto menos de lo que lo hacía antes. Me he vuelto más exigente y mi formar de valorar ha cambiado. Os cuento esto porque, por primera vez, al buscar mis diez mejores lecturas del año entre sesenta novelas, me costaba completar el número. Otros años se me quedaba corto. Y eso que muchas